Ayer se estrenaba el vídeo de "Pour It Up", bien por todos aquellos que durante tanto tiempo lo esperábamos. En él, Rihanna luce más sexy que Britney Spears en el de "Gimme More" (de temática ligeramente parecida) y con movimientos de glúteos parecidos a los que realizaría Nicki Minaj en cualquiera de sus vídeos. En cualquiera de los casos, Rihanna ha demostrado que lo hace mejor. "Pour It Up" (el corto) es en sí, dicen algunos, el genio y figura de una Rihanna a la que le apasiona desnudarse, otros aducen es un intento de la artista por llamar la atención ahora que medio mundo parece haberse concentrado en un ciento por ciento en Miley Cyrus, su pasión por el 'twerk' y no sabemos cuántas cosas más. Para nosotros, el vídeo de "Pour" representa a una mujer que no necesita de un hombre para divertirse (si a eso de andar en lugares de poca moral se le puede llamar divertirse), una mujer que como Rihanna hace gala de su juventud haciendo lo que le encanta hacer, y si eso de andar viendo cuerpos de personas de su mismo sexo a cambio de dinero le brinda satisfacción, sólo va y lo hace. En fin. Nada recomendable desde nuestro punto de vista.
Para terminar, las tomas súper-bien producidas. Nada como ver a una Rihanna luciendo el cabello negro largo ondulado y cubierta con joyería dorada y algo de cuero. Con sólo esa parte, ese traje, y ese fondo, nos ha encantado. Lo dicho, Rihanna no es sinónimo de moral, pero de que sus vídeos son dignos, lo son.