El Grammy es aquél único premio al cual los fanáticos más interesados pisotean, de la misma manera en que lo alaban cuando, luego de muchas disputas para decidir quien es o no el mejor, finalmente lo ven en manos de su artista favorito en justo reconocimiento de su arte e ingenio.
Este año, han sido muchos los resagados por los organizadores y críticos del galardón, entre ellos, quizá los más sonados, Justin Bieber y Nicki Minaj. Aunque con el primero se armó todo un alboroto e incluso, una vez más, se puso en tela de juicio la credibilidad del premio, algo muy diferente parece estar sucediendo con la intérprete de "Whip It". Y es que Nicki Minaj ha dado muestras de estar tomando con calma su no-nominación al premio que sin embargo vuelve a situar entre sus siempre favoritas a veteranas como P!nk y Beyoncé.
Cuando se le preguntó a Nicki al respecto durante una reciente entrevista para Access Hollywood, la rapera dijo: "He recibido miles de galardones y creo que cuando me haya llegado el momento de recibir un Grammy, recibiré un Grammy."
"Entiendo que los artistas y críticos le den suma importancia a los Grammys. Sin embargo, cuando voy a mis shows y me presento ante locaciones repletas en Londres, y cuando voy a Australia y Japón, no hay Grammys ahí. Hay seres humanos a los cuales he tocado. Hay seres humanos que son inspirados por mí y a los cuales amo con todo el corazón. Es en eso en lo que mi carrera se basa. No hay duda de que una se siente bien cuando recibe premios y reconocimientos. Quizá si hubiese estado haciendo esto durante 10 años y pensase, 'Oh, Dios mío, he lanzado diez discos' - tal vez eso lastime mis sentimientos. Pero aún me siento tan nueva que es como, 'Uno más para el juego'. En efecto, es parte del juego."