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Reportada en un inicio para ser estrenada en febrero de 2017, la tercera entrega de la saga Maze Runner, "The Death Cure", ha tenido que ser pospuesta por tiempo indefinido a causa de las graves lesiones sufridas por su protagonista, Dylan O'Brien, durante el rodaje de la cinta el pasado mes de marzo. Los informes relatan que el actor se encontraba grabando una escena de acción cuando de pronto fue visto cayendo de la estructura ferroviaria que lo mantenía de pie para luego ser arrollado por otro vehículo, dejándole como resultado del accidente "fracturas faciales, contusiones y laceraciones".

"Sus heridas son bastante serias y va a necesitar más tiempo para recuperarse", aseguró Jennifer Allen, publicista del actor, a través de un comunicado emitido ayer.