GLEE

Triste pero cierto. El joven actor de 31 años, conocido principalmente por su rol como Finn en la serie televisiva más exitosa de los últimos tiempos, Glee, fue encontrado muerto la noche del sábado pasado (13) en el cuarto del hotel en que se estaba hospedando desde hace algunos días, en la ciudad de Vancouver, Canadá. El joven había salido la noche del viernes con un grupo de conocidos, y vuelto la madrugada del sábado al Fairmont Pacific Rim Hotel, totalmente solo, según el registro de grabación de una cámara instalada a la entrada del establecimiento.

Cory ha muerto en circunstancias aún desconocidas, razón por la cual la policía de Vancouver no ha ofrecido hasta el momento ningún tipo de indicio acerca de la causante de su deceso. Este sin embargo saldrá a la luz el día de mañana, en que se de a conocer el resultado de la autopsia que se le práctico al cadaver del actor.

Esta noticia no deja de sorprendernos en especial porque era evidente las ganas de Cory por salir adelante, alejado ya de su adicción a las drogas (Cory había solicitado el apoyo de profesionales hacia sólo algunos meses y había desde luego iniciado una etapa de rehabilitación autoinfligida). No nos imaginamos lo que debe estar sufriendo su novia, la tambien actriz, Lea Michelle, a quien él en vida tanto quiso y gracias a quien se había propuesto ser una mejor persona para quien con el tiempo se convertiría en su esposa. Descansa en paz, Cory.

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